FLAMENCO
MUJERES AL CANTE

María Angeles Rodríguez Cuevas

"MARÍA MEZCLE"

MARÍA ÁNGELES RODRÍGUEZ CUEVAS, cantaora paya, más conocida en el mundo del cante flamenco con el nombre de MARÍA MEZCLE, nació en Sanlúcar de Barrameda (Cádiz) el día 28 de Julio del año 1987. Desde muy pequeña mostraba cualidades para el baile y el cante. De hecho, con tan sólo 6 años empezó a hacer sus primeros pinitos en el baile en la academia de baile Puerto Lucero donde más tarde se integraría en el grupo “Oleaje” (Sanlúcar de Barrameda).

Muy pronto, con 11 añitos, quiso ver la luz la rama cantaora que lleva en su sangre de Los Mezcles y Los Vargas. Con esta temprana edad inicia sus primeros pasos como cantaora bajo las indicaciones del gran conocedor del flamenco Domingo Rosado de Jerez de la Frontera. Su primera aparición en público como cantaora fue en Tele Puerto Real, en un programa de flamenco de Pepe Saldívar en marzo de 1999 con 11 años. Llevando tan sólo 4 meses estudiando el cante flamenco desde sus raíces, e interpretando ya por entonces soleá de Alcalá, la rosa, tangos y bulerías, se alza con el 1º Premio de Menores de 25 años y 1º Premio de los Cantes de Sanlúcar en el Concurso de Las Noches de bajo Guía de Sanlúcar de Barrameda el 29 de julio de 1999 (acabando de cumplir el día antes los 12 años).

A partir de aquí, podemos enumerar una gran cantidad de primeros premios por toda la geografía andaluza, entre los que destacamos: 1º Premio Joven de Cante por Livianas en Puerto Real con 12 años, 1º Joven de Cante por Peteneras en Paterna de Rivera con 12 años igualmente. Además de concursos, Mª Ángeles Cuevas, que así fue como se conocía artísticamente al principio, ya apuntaba alto realizando recitales por las peñas flamencas de nuestra provincia, como la Tertulia Flamenca “Pepe Alconchel” de Jerez (donde dio su primer recital), Peña Flamenca “Canalejas de Puerto Real”, Tertulia Flamenca de La Isla, etc, dominando varios cantes con tan sólo 13 años: rosas, alegrías, bamberas, livianas, peteneras, soleares, tientos, tangos, fandangos, bulerías, y por supuesto desde entonces también la Saeta. Además de cantaora, también saetera. Su primera saeta, por seguiriyas además, la cantó al Cristo de Las Misericordias en el balcón de La Iglesia de La Trinidad en el año 2000.

Como saetera, destacamos 5 Primeros premios Jóvenes en el Concurso de Saetas de la Peña Flamenca de “La Buena Gente “Jerez, desde el año 2002 hasta el 2010, y 3 Primeros Premios Absolutos en el mismo Concurso de saetas en los años 2004, 2006 y 2008. Además finalista en los certámenes de Saetas de Baena, Málaga, Cádiz y Sevilla. Por otro lado, además obteniendo el 1º Premio Absoluto de Saetas en Puerto Real con 14 años, 2º Premio de Saetas en San Fernando, 2º Premio de Saetas en Cádiz en el año 2008, 1ºPremio Absoluto de Saetas en Rota en el año 2009, y el 1º Premio en el Concurso Nacional de Saetas de Montilla, Córdoba en el año 2010.

Entre otros, ha formado parte del Festival de Lo Ferro de Murcia, por dos veces ha realizado recitales en la Peña Flamenca “La Platería” del Albaicín, Granada, ha conseguido el 1º Premio Joven en el Concurso de Cante Flamenco en Estepona, 1º Premio en el Concurso Nacional de Cante por Serranas de Prado del Rey en el año 2005 y 1º Premio en este mismo certamen de Cante Libre con la farruca, 1º Premio Joven en el Concurso Nacional de cante flamenco de Mairena del Alcor, 1º Premio Joven 2 veces consecutivas en la Peña Flamenca Camarón de La Isla y 2º Premio de mayores en el mismo concurso de La Peña Camarón en el año 2006, 2º Premio Joven en Fuente Palemra en el año 2008, 2º Premio de Cante por Alegrías de Cádiz en 2008, 3º Premio en el Concurso de La Silla de Oro de Leganés, Madrid en el 2008, siendo la elegida para actuar como artista invitada en el Festival de verano de Leganés para el año siguiente 2009, también como artista invitada, en el año 2007 presentó el Cartel del Concurso de Las Noches de Bajo Guía, donde tantas veces antes fue premiada con Primeros premios por los cantes de Sanlúcar, ha participado este año en el Festival del Enclave de Sol compartiendo Cartel con Luis El Zambo, Moraíto y Antonio Rey, y un largo etcétera.

Ha formado parte durante tres años del Circuito Flamenco que organiza la Federación de Peñas Flamencas Andaluzas, actuando en la Peña Flamenca “La Solea” de Palma del Río, Peña Flamenca “Las Colonias” en Huelva, Peña Flamenca de La Luisiana, Sevilla, Peña Flamenca “Rincón del Cante”, Córdoba, etcétera. Participó varias veces en el Programa de Fandangos del Canal Sur. En el año 2009 formó parte del Festival “Jueves Flamencos” de Cádiz en el Baluarte de La Candelaria, compartiendo cartel con Felipe Scapachini y Juana la del Revuelo. Además de cantaora larga y saetera, María también ha cantado y canta para el baile: con Asunción de Martos de Sevilla, Raquel Villegas, Sonia Sarmiento, Miguel Téllez…y desde primeros de años de 2009 entró a formar parte de La Compañía de Flamenco del artista jerezano “Antonio El Pipa”, con el que ha pisado todos los teatros de las provincias andaluzas desde Cádiz hasta Jaén, pasando por Almería, Granada Málaga y Sevilla.

Además, María ha formado parte de los Cursillos Flamencos que lleva a cabo la Agencia Andaluza para el Desarrollo del Flamenco en Cuba (La Habana) y México (Guadalajara) bajo la dirección de Antonio El Pipa, siendo ella la Maestra de los talleres de Cante Flamenco, en el año 2009. Hasta la actualidad, María cuenta en su saber con los siguientes palos: Soleares, seguiriyas, tonás, deblas, carceleras, martinetes, saeta, solea por bulerías, bulerías, alegrías, rosas, caracoles, mirabrás, cantiñas, tientos, tangos, farruca, colombianas, guajira, bambera, petenera, liviana, serrana, taranta, taranto, verdiales, fandangos, granaína y media granaína, malagueña, nanas y cantes de trilla, que suman en total 31. Por último, tenemos que darle la mayor relevancia a su primer Disco de Flamenco, titulado con su propio nombre: “María Mezcle”, producido por Gerardo Núñez para El Gallo Azul Récords, año 2010.

-El Arte de vivir el Flamenco-

Espacio Santa Clara. 14 de septiembre de 2012. Cante: La Sallago, María Mezcle. Guitarra:Adrían Lozano. Entrasa: Aforo completo.

Si no fuera porque un monstruo de la guitarra y su hermano, gran músico y productor, adoptaron como apellido el nombre de esta ciudad, Sanlúcar correría a veces el riesgo de ser preterida, desplazada como ciudad flamenca por el protagonismo de Cádiz y los otros Puertos.

Para refrescarnos la memoria vinieron ayer a Sevilla dos cantaoras de generaciones distintas que pusieron patas arriba el Dormitorio alto de Santa Clara. Dos sanluqueñas, herederas de las voces fundacionales de Manuela La Bizca o María la Mica, que respondieron a la hospitalidad de Sevilla, como está mandado, pero también sacaron con justificado orgullo la bandera de su tierra.

Empezó gustando y gustándose la joven María Mezcle, poseedora de uno de los apellidos históricos del flamenco sanluqueño y de una fuerza vocal acorde con su imponente figura sobre las tablas. Honró a Tomás Pavón en la debla y por seguiriyas, para a continuación ofrecer una rosa blanca, símbolo de pureza, a su maestra Encarna La Sallago y regalarle el mirabrás de su tierra. Quizá sólo deba mejorar con el tiempo su vocalización para sacar el máximo partido a su voz hermosa e hiriente, pero todo lo demás lo tiene. Ayer lo entregó.
Si María estuvo espléndida, lo de La Sallago ya fue para echar abajo la torre de don Fadrique. 93 años, ¡93!, un hilo de voz precario y un cuerpo que parecía que iba a deshacerse como un terrón en mitad de un ay, pero con una gracia y una naturalidad que no son fáciles de ver en un escenario. "He subido antes y toda la fuerza la he echado", se disculpó al no poder rematar la seguiriya, pero lo compensó con creces, con el inestimable apoyo de María y del guitarrista Adrián Lozano, cantando con todo el cuerpo allí donde la voz no llegara, bailando con insólita vitalidad por bulerías. La sala se caldeó, los artistas se vinieron arriba, se puso a aplaudir con ganas hasta el guarda de seguridad, y hubo un momento en que de allí no quería irse nadie. María homenajeó en una bella letra a Ramón Medrano y otros memorables maestros sanluqueños, y todos salimos de allí con confortante sensación de ebriedad: la manzanilla es lo que tiene. ¡Viva Sanlúcar!