Rito y Geografía del Cante. Falla y el flamenco.

FLAMENCO

El Flamenco a principios del S.XX. 

MANUEL DE FALLA

1922 es un año clave como hito en la apertura de los intelectuales al Flamenco con motivo de la organización del Concurso de Cante en Granada. Don Manuel de Falla fue el principal artífice, ayudado en todo por Federico García Lorca. Falla también percibía que la copla estaba acabando con el ‘genuino canto andaluz’ (con el Flamenco). Manuel Rios Ruiz (Candil, 1989) observa que es erróneo que el Flamenco hubiera “muerto” prácticamente desde que cerraron los últimos Cafés Cantantes, pues las reuniones cabales siguieron teniendo lugar. En dichas reuniones el ‘buen flamenco’ (un estilo de cante, toque y baile y unas formas ‘clásicas’) se seguía cultivando. Aduce Ríos Ruiz que en esa época (primera mitad de siglo XX) estuvieron en activo artistas que hoy retenemos como auténticos. En efecto de esos años estaban son artistas de la talla de un Manuel Torre, Cepero, el Gloria, Aurelio de Cádiz, Juanito Mojama, Pepe Marchena, Manolo Caracol, Niña de los Peines, Cojo de Málaga, Carmen Amaya, Vicente Escudero o Sabicas. Pero la mezcla estilística y puesta en escena relamida era lo que el público y las casas discográficas iban exigiendo y por tanto lo que se percibía como ‘Flamenco’.

Esto hacía que muchos percibieran al Flamenco en confusa mezcla estilística con la Canción Española o Copla. 

Falla y el flamenco. Rito y Geografía del Cante.