Portada del libro sobre la genial cantaora.

Tres románticos rescatan a

"La Repompa"

Manuel Bohórquez

Mientras las instituciones públicas dedicadas a la promoción del flamenco se afanan en politizar el género andaluz y en poner ricos a algunos artistas de moda, existen personas que invierten su dinero y su tiempo en escribir la historia de quienes contribuyeron con su arte a hacer universal la cultura de lo jondo. Los grandes aficionados malagueños Paco Roji, Ramón Soler Díaz y Paco Fernández se pusieron a trabajar hace tiempo en la biografía de la gran cantaora malagueña Enriqueta Reyes Porras, que hizo célebre el remoquete artístico de La Repompa. Ya era hora de que los malagueños rescataran del olvido a una de las mejores cantaoras de la tierra de Juan Breva y El Canario, sin duda alguna su mejor festera, creadora de un estilo tan personal que la situó entre las cantaoras más interesantes de toda Andalucía. Nacida en 1937 y fallecida en 1959, o sea, con solo 22 años, aprovechó bien el tiempo y tuvo una vida artística muy intensa y repleta de éxitos. Su muerte no contribuyó a que cayera en el olvido, como ocurrió con destacadas figuras del género, sino todo lo contrario. El hecho de morir joven y como había dejado un estilo propio, sirvió para que su arte quedara como una referencia para muchos artistas de su tierra y de fuera de ella. El libro recoge toda su trayectoria y está ilustrado con decenas de fotografías y documentos. Estupenda biografía que viene a reparar una injusticia histórica, que rescata del olvido a quien tuvo el don del arte, del compás y del son malagueño.