Cantes americanos / Peteneras

FLAMENCO

Está muy extendida la idea de que las peteneras tienen un origen sefardita, posiblemente por la temática de alguna de las letras más populares del repertorio. Sin embargo, los datos últimamente hallados son concluyentes: la petenera tiene un origen mexicano. Ya en 1803 aparece en el repertorio azteca, y algunos sones de Veracruz llamados peteneras tienen idéntica rueda armónica en el acompañamiento y una tonada también muy emparentada en lo melódico. No en vano el compás es el mismo que en las guajiras, más lento y consecuentemente más libre. El acervo flamenco de las peteneras es variado y en la actualidad conocemos por lo menos hasta un total de tres estilos fundamentales: la antigua y la moderna, y ésta, a su vez, diferenciada en corta (o chica) y larga (o grande). Se atribuye a Medina el Viejo la definición de la petenera flamenca hacia 1880 (dos tipos de petenera corta y uno de petenera larga), modelo que más tarde divulgaría Antonio Chacón, y que cultivó igualmente la Niña de los Peines. Esta es la petenera que se canta en la versión bailable, con pasos de seguiriya y mantón, castañuelas o pitos (chasquidos) y palmas, y también se conoce como petenera chica, que se utiliza normalmente como preparación de la petenera larga. Tonalidad Es uno de los pocos géneros flamencos en tono menor, con una rueda armónica muy característica. Compás La métrica es 6x8 + 3x4 (amalgama vulgarmente conocida como compás de peteneras) y al igual que el punto cubano se pueden cantar con un ritmo fijo (punto fijo) o con ritmo más libre (punto libre). La melodía es métrica y no realiza melismas exceptuando la escala ascendente propia de la petenera flamenca sobre la letra "a". Estrofa Utiliza la cuarteta octosílaba (romance), repitiendo algún verso o introduciendo un ripio. El cante se extiende durante catorce compases y tiene cuatro fragmentos cadenciales de dos versos cada uno que se completa con repeticiones o palabras de relleno. Claves La petenera, al igual que la guajira, tiene varios elementos que la identifican. Su compás, su melodía muy característica o las expresiones como "madre de mi corazón" en forma de ripio. PETENERAS Misionero de Dios 3:07 Pepe el Culata Guitarra: Melchor de Marchena (Popular) He aquí las peteneras cortas, primeras que se consagran en el género flamenco, dichas por Culata con exquisitez jonda. El compás amalgamado de la petenera (ver) se muestra en esta versión (y en casi todas las variantes de la petenera flamenca) disuelto en las secciones cantables, para recobrar sentido rítmico en las variaciones de guitarra. La melodía de esta versión recreada por Culata corresponde con fidelidad a una de las variantes más señeras del repertorio de la petenera corta. PETENERAS Quisiera yo renegar 4:35 Carmen Linares Guitarra: Enrique de Melchor (Popular / Carmen Linares) Con divino acompañamiento, Carmen Linares afronta las ciclópeas peteneras que los Medina y la Niña de los Peines nos legaron, la conocida como petenera larga, con sus característico diseño melismático, de enorme dificultad interpretativa y pleno de jondura en la versión de Carmen. PETENERA - GUITARRA Peteneras 3:42 Pepe Romero (Pepe Romero) La petenera no ha sido frecuentada por el toque moderno de concierto, pero éste es uno de los contados ejemplos que existen, con una guitarra cantarina que juega sobre las melodías del cante. En esta versión sí es patente la amalgama de 6x8 y 3x4 que caracteriza la métrica de la petenera flamenca. Escuchamos también los cantables llevados a la guitarra, sobre la melodía de una de las peteneras flamencas más antiguas y deudoras de los aires veracruzanos de donde procede, aquella que dice "señor alcalde mayor". PETENERAS SOLEÁ (SOLEÁ-PETENERA) En Veracruz me han prendío 3:02 Flores el Gaditano Guitarra: Antonio Arenas (F. Ruiz Lara) En los tiempos de Silverio Franconetti -con el maestro a la cabeza- se estiló un cante bravío, cruce de soleá y petenera, que nos ha llegado muy desdibujado. Flores el Gaditano entrega unas soleares que abrocha con, diríamos, una soleá-petenera made in Flores, que para eso está el libre albedrío. Al contar ambos estilos con un compás de doce tiempos no resulta excesivamente complicado aplicar el aire de soleá a la melodía de petenera, como queda aquí demostrado. -Flamenco de la A a la Z-